Julija, Liubliana

Ternera con puré trufado

Salir a cenar en Liubliana sin reserva es todo un deporte de riesgo. Puedes recorrerte todos los restaurantes de la calle Stari sin que puedas sentarte en uno y si lo haces, ten por seguro que no será de los mejores. Así que si visitas la capital eslovena en temporada alta y te apetece salir a cenar por esta parte de la ciudad, mejor ven muy temprano o asegúrate de reservar.

Con la lección aprendida de la noche anterior, salimos bien tempranito a probar suerte. Le habíamos echado el ojo al Restaurante Julija y nos apetecía disfrutar de una rica cena eslovena en su bonito comedor. ¡Dicho y hecho! Algo antes de las ocho de la tarde estábamos sentados con una copa de Sauvignon de las Bodegas Kristancic, un blanco ligero y afrutado que no está mal para empezar.

Comenzamos con una riquísima Sopa de Tomate, algo más especiada de lo que estamos acostumbrados, pero que resultó un entrante estupendo y ligero antes de los contundentes y sabrosos platos principales: Ternera con hongos en salsa de vino Terrano y dumplings de queso y Ternera con puré trufado que acompañamos con un Pinot Noir (Modri Pinot) de la misma bodega.

No había mucho sitio para el postre, pero "Applestrudel y casero" en la misma frase es algo a lo que nos cuesta decirle "no" y fue una decisión acertada porque estaba riquísimo.

Si pasáis unos días en Liubliana, es una opción muy recomendable.