La gastronomía austríaca

Comer en Austria es un placer para los estómagos hambrientos y para los golosos, por la generosidad y contundencia de sus platos y por sus fantásticos dulces. No faltan las pastelerías ni las ocasiones en Austria para tomar algún dulce a media mañana o a media tarde. El rey de los dulces austríacos para mí es el Apfelstrudel, una deliciosa tarta que curiosamente probé por primera vez en el Restaurante Kudamm de Granada. Luego volvimos a reencontrarnos en un restaurante en Melilla y mi siguiente encuentro con ella fue en una espectacular cafetería de la bella ciudad de Heidelberg. Desde entonces nuestra historia de amor continua por todas las ciudades alemanas, húngaras o austríacas que visitamos. 

Apfelstrudel con nata y el café de media tarde
Apfelstrudel con crema de vainilla caliente

Pero no solo de dulces vive el hombre. Si eres carnicero, esta es tu zona. Con salsa, empanada, guisada... Nos hizo gracia comprobar que el plato más típico de la cocina austríaca es el Schnitzel, un filete empanado, servido con ensalada de patata y mermelada de arándanos. 

Schnitzel

Si lo tuyo es la pasta y el queso, te va a encantar el Käsespätzle, una masa parecida a los gnocchi, con mucho queso y cebolla frita por encima. ¡Qué sudores pasamos tomándolo y eso que hacía frío! Yo lo recomendaría para dos porque aunque está deliciosa, puede llegar a cansar un poco.

Käsespätzle

Si no comes carne, no sufras. Siempre podrás encontrar truchas y arenques ahumados o la "archifamosa" Kartoffelsalat o Erdäpfelsalat, ensalada de patatas, cebolla, vinagre, mostaza y perejil que se sirve como acompañante de muchísimos platos principales.

Trucha ahumada

Hay muchas más delicias que probar, sobre todo dulces, pero os dejamos que vayáis y seáis vosotros los que la disfrutéis.


Comentarios

  1. Dónde tienes una cámara de videovigilancia en mi casa!! Estuve en Viena el finde pasado y estoy preparando la entrada de esta semana sobre la comida y la ciudad. ¡Qué fuerte! Aquí hay una conexión cósmica o algo.
    Tu entrada me parece genial, es exactamente lo que hay allí. Me tendré que esforzar muy mucho para igualar ésta.... Grrrrr, qué rabia y qué alegría compartir con vosotros estos pequeños secretos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias! Jeje Sentimos haberte estropeado la entrada. ¡Ya es casualidad! Vamos a tener que quedar un día. Nosotros no llegamos a Viena. Exploramos Salzburgland y Tirol, así que te dejamos algo de margen.

      Eliminar

Publicar un comentario